Hábitos que le ayudaran a mejorar sus habilidades cognitivas

Nuestra función cognitiva depende en buena medida de lo que hacemos en nuestro día a día. Por eso, es importante incluir hábitos diarios que mejoran la función cognitiva en nuestra vida.

Pero, ¿es posible mejorar la función cognitiva, a pesar de los años? La respuesta es simple y sencilla: sí. La buena noticia es que darle un impulso extra a nuestro rendimiento cognitivo no requiere de nada especial, sino que basta con mantener algunos hábitos diarios para conseguirlo.

Lea mínimo 20 minutos al día

La lectura como hábito pone a nuestro cerebro a pensar, es decir, crea conexiones neuronales nuevas. Está relacionada con la zona del cerebro encargada del lenguaje, el análisis, la retórica y la interpretación. 

✅Estudie un idioma nuevo. Aprender una lengua diferente fortalece la memoria

Aprender cosas nuevas y nuevas habilidades exigentes mantiene comprometido y activo al cerebro para mantenerse fuerte a medida que se envejece.

✅Ejercite su mente a través de juegos de crucigramas, ajedrez o rompecabezas

Jugar es una de las mejores formas de aprender y ejercitar la mente. Haga sudokus, crucigramas y rompecabezas; juegue ajedrez y otros juegos que impliquen estrategias.

La mejor manera de mantener nuestro cerebro activo es realizando actividades nuevas todos los días. Aprender una palabra, un dato curioso, la capital de un país, y tener una actitud dispuesta frente a los retos de cada día y hacerlo un hábito, mantiene nuestra mente en forma.

Medite, esto le ayudará a disminuir estrés, lo cual favorece el cerebro y lo protege de enfermedades degenerativas

Esta disciplina milenaria es considerada una forma de expandir la mente y aumentar nuestro estado de consciencia, a demás nos permite estar más despiertos, conscientes y atentos a lo que ocurre en nuestro día a día. 

✅Duema suficiente, el cerebro requiere de sueño para consolidar el aprendizaje y la memoria. 

Uno de los motivos por los que se cree que el cerebro puede beneficiarse de sueño es que durante ese tiempo tiene más energía  disponible, o porque las distracciones son menores.

Es importante recordar que, para mantener nuestro cerebro sano, además de procurar favorecer la reserva cognitiva, hemos de controlar también los factores de riesgo cardiovascular, cuidar nuestra alimentación, hacer ejercicio físico y cultivar las relaciones sociales.